El concepto de empleado como la persona que pone su tiempo a disposición de la empresa a cambio de una ocupación está dejando paso al del profesional autónomo que funciona como una microempresa, que gestiona un proyecto dentro de una compañía. Según Jordi Collell, socio fundador de la consultora Soymimarca, se percibe un incremento de la preocupación por el desarrollo de la marca personal en España. El propósito es conseguir identificar aquello que te hace
valioso, útil y fiable para que te perciban como la persona o el
profesional con quien hay que trabajar.
Donde la marca personal está tomando más fuerza es en los sectores damnificados por la crisis, que son los que más se están decantando por el autoempleo. La irrupción de Internet y las redes sociales "han democratizado la gestión de la marca personal", explica Collell.
Así como las marcas comerciales regalan muestras de sus productos para ganarse la confianza de los consumidores, las personas también tienen que presentar gratis algunos ejemplos de su trabajo. La paciencia, la perseverancia y la coherencia son claves en este proceso porque la marca acompañará siempre a la persona.
La era digital ofrece un ingente abanico de posibilidades, pero también algunos riesgos ya que antes había licencia para equivocarse, pero ahora un comentario desafortunado por ejemplo, puede perseguir a su emisor durante muchos años.
El rastro digital es difícil de borrar.
Adaptación del artículo "Yo soy mi propia marca", publicado en el extra Marcas de El País (30/11/2012)
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